Abstract

Si preguntáramos a muchas personas el significado de la palabra escalada, quizá responderían mezclando modalidades y términos: alpinista, montañero, piolet, cima, conquista, riesgo, lucora, etc. Se cree normalmente que un escalador persigue como meta el Everest. Otros piensan que se escala tirando de la cuerda en la que se ata el otro compañero. Se dicen miles de risorias anécdotas, fruto del desconocimiento y de una deficiente información, muchas veces sensacionalista y confusa. La escalada deportiva es una modalidad concreta que posee su propia concepción sobre el sentido, la técnica y la progresión vertical, perfectamente diferenciada de otras especialidades. Hay que distinguir diferentes modalidades entre la escalada. Podríamos decir que existen tres grandes bloques: el alpinismo, la gran montaña hivernal (Andes, Alpes, Himalaya), y la escalada deportiva. En todas ellas se realiza la escalada como actividad común, pero la esencia varía totalmente de un bloque a otro. Un himalayista no realiza la misma escalada que un escalador deportivo, y viceversa. Son mundos diferentes que tienen en común un entorno natural. Vamos a verlos con más detalle: Escalada continuada. Este tipo de escalada es la más practicada actualmente en nuestro país. Sus reglas de juego son las siguientes: el escalador sube en libre mientras su nivel físico-psíquico se lo permite. Cuando llega a una zona donde no puede continuar, utiliza los medios artificiales (clavos, spits, cintas), ayudándose para progresar hasta donde nuevamente pueda continuar en libre. Se desarrolla siempre en roca, en macizos de baja montaña.