Las actividades en la naturaleza como marco de una educación física activa y eficaz

Las actividades en la naturaleza están de moda. Ésta viene determinada, fundamentalmente, por el despertar social de intentar vivir intensamente el tiempo libre y, por la concienciación general que existe sobre el grave problema de la degradación del medio ambiente (TV. ha dedicado varios reportajes al tema; la revista «Natura» le dedica 6 capítulos entre abril y septiembre; los periódicos están llenos de artículos; la revista «Time» proclama a la Tierra Personaje del Año), junto a la preocupación por su conservación, recuperación y mejora. Esta preocupación social, no hace más que, reforzar todas las actuaciones y esfuerzos tendentes a incluir estas actividades en los programas educativos escolares. Los esfuerzos en este sentido no han sido pocos ni, tan sólo, son un eslogan moderno. De hecho se trata de una vieja y conocida reivindicación renacentista (Rousseau, 1762). Desde entonces, la idea de incluir las actividades en la naturaleza, en los programas escolares, ha ido evolucionando, con sus altibajos, pero sin terminar de consolidarse plenamente en nuestras programaciones educativas. No obstante, cabe aclarar que, para Rousseau, las actividades en la naturaleza suponían un medio educativo que posibilitaba aislar al educando del medio social que lo pervertía. Mientras que, para nosotros, suponen una inhibición o freno de las exigencias y responsabilidades sociales, lo que permite un mayor efecto socializador sobre el individuo, al favorecer la comunicación e interrelación grupa], el trabajo en equipo, la autonomía, la responsabilidad individual y la responsabilidad compartida… Pero además, son un medio para ampliar los conocimientos sobre la naturaleza. Cuanto más se conozca, más apreciada y defendida será. Quisiéramos que este escrito fuese un grito de alerta para todos los educadores en general y, para todos los profesores de educación física en particular, para defender y reivindicar dos grandes áreas de interés de estas actividades: la educativa y formativa, y la concienciadora sobre el grave problema que la degradación del medio nos plantea.